Colocaremos a nuestra Santísima Muerte encima y colocaremos velas a cada lado, flores e inciensos. Se sugiere poner un plato de barro, cenicero y un vaso de cristal, que son los utensilios exclusivos de la Santísima muerte.
Para instalar y consagrar este altar el día más propicio es el martes. Por la mañana es ideal la Santa se ha despertado y tiene mucha fuerza con una energía emprendedora y a la que le gustan los retos; por la tarde está en la plenitud de su poder, y a la noche, se manifiesta la energía de las fuerzas ocultas. Para levantar el altar, la persona ha de estar tranquila y serena, sin prisas ni preocupaciones; pues se dedicará en cuerpo y alma a la Santa Muerte.
Para elegir la imagen de la Santísima, puedes elegir cualquier figura que te guste, que se suelen fabricar en barro, resina, fibra de vidrio o papel maché con los diferentes símbolos que antes comenté.
Hay que decidir si se quiere tener una imagen de cuerpo entero, sentada, en un trono etc. También el color según nuestras necesidades espirituales. También puedes poner varias santas, dedicadas a algunos trabajos especiales y colocándolas independientemente con sus ofrendas. Es preferible que escojas una imagen que nos transmita confianza, fe y devoción.
También puedes elegir una imagen impresa o cuadro de la Santa Muerte, si no se dispone de espacio para colocarla. También hay que escoger la que te inspire más confianza, fe y devoción, pues no importa su representación, ya que ella está en todas sus formas. La ventaja de elegir un cuadro o imagen es que puedes transportarla a cualquier lugar y cabe en cualquier sitio.
Para poder seguir hay que consagrar el altar, y debe ser alguien que conozca y maneje energías en el tema mortuorio, con lo que cada cual elige a la persona que más confianza le transmite. Pero si es tu propio altar y lo haces tú, lo puedes pedir tu mismo con mucha fe, porque seremos nosotros quienes lo atendamos y le rindamos culto. Para ello tendrás que limpiarte primero y luego limpiarás el altar. Es muy importante que para hacer cualquier rito lo hagas: has de limpiarte y purificar el cuerpo, el alma y el espíritu. Hay que bañarse en agua caliente, para abrir los poros y te ayudará a recibir las energías que estás a punto de generar.
Después has de vestirte de color blanco, y mientras te estás vistiendo rezarás:
¡Oh! Señor, perdóname te suplico,
he tenido errores, pero me arrepiento,
te pido perdón, por todos los males
que he causado consciente e inconscientemente,
te ofrezco buen comportamiento,
ya que las fuerzas que invoco son de buena fe
y no pretendo hacer ningún mal,
sino que lo hago porque pienso
en la felicidad de esta persona y la mía,
si tú decides lo contrario, lo acepto.”
Se rezan 3 Padrenuestros y 3 Avemarías.
Ritual de limpieza
Se ha de realizar antes de hacer cualquier otro, ya que debe existir un ambiente limpio de energías para poder invocar a la Santa Muerte.
Materiales:
un mortero para mezclar todo
una vela blanca
mezcla para limpiar (en grano): una parte de incienso, una parte de mirra, una parte de ruda, una parte de lavanda, una pizca de chile en polvo
un incensario para poner la mezcla
una copa de cristal con agua y sal